FIFA: Chivas - Un Lugar en la Historia

Un reportaje de FIFA sobre las Chivas de Guadalajara

Un lugar en la historia
(FIFA.com) Viernes 26 de febrero de 2010

Se dice fácil. Siete partidos jugados, todos ganados. La mejor ofensiva del torneo, con 17 goles marcados. La segunda mejor defensa, con 6 goles recibidos. El líder de anotaciones, Javier “Chicharito” Hernández, con 8 goles marcados en 6 encuentros. Y, claro, el primer lugar en la tabla, con 21 puntos, cinco más que su perseguidor, el campeón Monterrey.

Y, con todo eso, las estadísticas sólo cuentan una parte de la increíble historia de las Chivas del Guadalajara, en su versión Bicentenario 2010. Con su triunfo de la semana pasada ante el Puebla (3-2), los rojiblancos rompieron el récord del mejor inicio en la historia del fútbol profesional mexicano, y si se imponen al San Luis, habrán batido la marca de todos los tiempos, que ahora comparten con el Marte, implantada en 1928, cuando el balompié azteca era aún amateur.

Un inicio incierto

Ni los aficionados más optimistas esperaban ese comienzo para su equipo. Como suele suceder desde hace algunos años, las Chivas no se reforzaron demasiado para este torneo. Aunque hay que reconocer que el único nuevo fichaje despertaba ilusión tan sólo por el nombre: Adolfo Bautista, el ídolo rojiblanco.

Pero el “Bofo” llegaba tras un torneo terrible en Jaguares de Chiapas y sin ritmo para ser titular desde las primeras jornadas, y el resto del plantel era el mismo que había sido incapaz de clasificarse a la liguilla en el recién terminado Apertura 2009. Para rematar, su técnico, José Luis Real, tenía muy poca experiencia en primera división, por lo que los auspicios no alentadores al inicio de la temporada.

Así, con el equipo emprendió el camino muchas dudas, y su primer desafío era nada más y nada menos que frente al Toluca, uno de los habituales contendientes al título en México. Y, contra todo pronóstico, las Chivas se impusieron con toda facilidad a los Diablos Rojos (3-1), con dos goles del joven delantero Javier Hernández, que en muy poco tiempo se convertiría en el ídolo total del equipo.

Juego bonito, grandes resultados

Con el paso de las semanas, las sorpresas se volvieron confirmaciones y los triunfos no dejaron de caer. Tras el Toluca, siguieron los Tigres, que mordieron el polvo en su feudo de Nuevo León (1-3), y luego los Estudiantes Tecos, derrotados en el inexpugnable Estadio Jalisco (3-2). El póker de victorias llegó en Querétaro (0-2), y los fanáticos rojiblancos empezaban a creer que su equipo tenía algo especial.

La figura en esos primeros encuentros fue el “Chicharito”, que no dejó de marcar en el inicio de temporada, y con su gol en la quinta victoria consecutiva, esta vez ante el Atlante (2-0), llegó a ocho tantos, con los que se encaramó a la cima de la tabla de goleadores. Pero, en la víspera del siguiente partido en el temible Estadio Hidalgo de Pachuca, Hernández se lesionó y no pudo disputar el encuentro.

Fue entonces que las Chivas demostraron ser algo más que un jugador. Con una defensa inexpugnable, liderada por tres internacionales mexicanos, el portero Luis Michel, y los centrales Aarón Galindo y Jonny Magallón. Con un Adolfo Bautista finalmente recuperado y un golazo del joven mediocampista Ivan Báez, el Guadalajara se impuso al Pachuca (0-1) y quedó sólo a una victoria de la marca de más triunfos consecutivos al iniciar un torneo.

Así, todo estaba preparado para la fiesta, en el Estadio Jalisco, ante el Puebla, que salía como víctima propiciatoria. Un triunfo más y las Chivas entrarían en la historia. Y la victoria llegó, pero con sangre sudor y lágrimas. Aún sin su goleador estrella, que entraría de cambio un poco más tarde, las Chivas consiguieron rápidamente una ventaja de 3-1, que parecía sellar el destino desde el minuto 48.

Pero Puebla reaccionó furiosamente, redujo la desventaja y asedió el marco rojiblanco durante treinta largos minutos. Al final del “partido más difícil de la temporada”, como lo definiría el técnico Real, las Chivas pudieron levantar los brazos (3-2) y reclamar su lugar privilegiado. Un sitio que pueden grabar con letras de oro si, este sábado, derrotan al San Luis y suman un inédito octavo triunfo en fila.